Queda prohibido comer pipas en los parques infantiles

El Ayuntamiento de Adra ha aprobado una nueva ordenanza cívica que regulará la convivencia y el buen uso de los espacios públicos y, entre las normas establecidas, se incluye la prohibición de comer pipas en los parques infantiles “por motivos de salubridad, seguridad y ornato público”. Además en el resto del pueblo las cáscaras de pipas o similares, así como otros desperdicios, se deberán depositar en las papeleras si se quiere evitar una sanción económica.

La ordenanza, que regula numerosas cuestiones relacionadas con el correcto mantenimiento y conservación de los espacios públicos, evitar actos vandálicos y fomentar la conciencia ciudadana de los vecinos, irá acompañada de un plan especial de vigilancia para procurar el cumplimiento de las normas.

Incumplirlas supondrá la apertura de expedientes de infracción que se clasificarán en leves, graves y muy graves y que pueden acarrear multas de entre 75 y 600 euros. una de las cuestiones que se recogen es que esas sanciones podrán ser sustituidas por trabajos en beneficio de la comunidad “con la finalidad de favorecer la reeducación”.

Mayoría
La nueva ordenanza fue aprobada en el último Pleno Ordinario del Ayuntamiento con los votos a favor de PP, PSOE y Ciudadanos y en contra de Plataforma Ciudadana. Según el alcalde, Manuel Cortés, con ella se hace partícipes al conjunto de los abderitanos “de la importancia de conservar en buenas condiciones los espacios públicos de los que dusfrutamos todos, además de erradicar los actos vandálicos”.

Se ha previsto también que los daños  causados puedan ser repuestos por los causantes; si esa reparación se produce antes del inicio del procedimiento, eso supondrá que no se imponga sanción alguna. El Ayuntamiento se ha comprometido a que el importe de las sanciones sea destinado a la reposición de los daños causados, a la realización de campañas informativas, educativas y de concienciación, así como a la reparación y mantenimiento de parques, zonas ajardinadas y resto de espacios públicos.

Entre las medidas que recoge la nueva norma están realizar pintadas o graffitis, colocar carteles, vallas, rótulos o pancartas; instalar antenas y otros artefactos similares en fachadas, terrazas o tendederos, arrojar a la vía pública productos que deterioren la imagen del pueblo; manipular las plantas en jardines o los juegos ‘peligrosos’.