Níjar

Persiguen al padre de un bebé de un mes muerto de un golpe en la cabeza durante una discusión

Una testigo relata los instantes posteriores: "Su madre le decía que dejara a ese hombre, que iba a matar al niño”

Javier Pajarón
12:33 • 24 jun. 2016

Un grupo de niños revolotea en el Residencial Campohermoso entre las piernas de los periodistas y los coches de la Guardia Civil y vulnera, con una despreocupada impunidad, el cordón de seguridad tejido a ambos lados de la calle Virgen María. Repiten con ligereza la historia del bebé ensangrentado que salió de la casa de la izquierda, entre los gritos desesperados de su madre y de su vecina, como si hubiera transcurrido una eternidad, y recuerdan como una aventura la llegada de las patrullas y la ambulancia. Luego pierden el interés por las cámaras de televisión y retoman sus juegos sentados en una esquina cercana. Un drama, en una zona deprimida.




A pocos metros se dibuja una escena de postguerra. Los vecinos lloran la pérdida del pequeño Abdel de 45 días de vida y la desgracia de la madre, Zahara, veinteañera de origen marroquí. Mientras, los expertos de Criminalística de la Guardia  Civil inspeccionan el interior de la vivienda y fotografían los restos para reconstruir la secuencia del presunto crimen cometido a las 13.30 horas del viernes.




La investigación tiene un único sospechoso, el padre, en paradero desconocido. Se llama Hicham, tiene unos 30 años de edad y reside de forma intermitente en la vivienda familiar desde hacía cuatro meses, según indican sus vecinos. Tiene parientes en la barriada de San Isidro (Níjar) y carece de una profesión conocida.




Agresión
Según los testigos, Hicham y Zahara mantuvieron una fuerte discusión en el interior de la casa familiar, audible en las viviendas más cercanas de la calle, ubicada en un residencial de unos 50 inmuebles a dos kilómetros de Campohermoso, detrás de la ITV de Níjar.




De repente, los gritos se convirtieron en llantos. Hicham salió del inmueble y se montó en un turismo de color gris (con un parachoques de otro tono). Paralelamente, en el interior, Zahara sostenía entre los brazos al pequeño Abdel con un golpe en la frente y una vecina trataba de reanimarlo sin éxito. Hasta el Residencial Campohermoso se desplazaron miembros de la Guardia Civil, la Policía Local de Níjar y Emergencias Sanitarias. Para entonces Hicham había huido ya del lugar en su propio vehículo.




Los equipos de emergencia trasladaron a Abdel hasta el centro de salud de Níjar en estado crítico. El menor murió en pocos minutos por un grave traumatismo craneoencefálico. Los médicos sólo pudieron certificar el fallecimiento del bebé. La comisión del Juzgado de Instrucción número Cinco de Almería, en funciones de guardia hasta el martes, autorizó el levantamiento del cadáver y la funeraria llevó los restos mortales sobre las 18 horas hasta las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Almería, en la Ciudad de la Justicia.




Los forenses deben aclarar ahora elementos muy importantes para el caso como el número de golpes o la posible utilización de un objeto contundente. Fuentes consultadas por LA VOZ DE ALMERÍA apuntan a un impacto contra el suelo durante la discusión de la pareja, aunque la Benemérita guarda silencio hasta el momento.




La madre del pequeño se encuentra en estado de shock, aunque la Guardia Civil recogió sus primeros testimonios sobre el suceso para clarificar la secuencia de hechos e impulsar la investigación. Al cierre de esta edición, la persecución del presunto agresor seguía activa, según precisó la Subdelegación del Gobierno.


Testigo
El Residencial Campohermoso es un pequeño núcleo urbano con 50 viviendas ubicado entre invernaderos y naves industriales, a pocos metros al sur de la Autovía del Mediterráneo. Todos los vecinos se conocen y el suceso generó una enorme conmoción en la comunidad.


La primera persona en acudir a la llamada de auxilio fue una vecina cercana (una de las dos familias españolas del paraje), testigo directo de los instantes posteriores a la presunta agresión a Abdel en el interior de la vivienda de la pareja. Su relato evidencia el drama de la situación, pero también arrojan luz sobre elementos determinantes para establecer la secuencia de acontecimientos.


“Escuché una discusión entre ellos y los gritos de la madre, me acerqué a la casa y me metí dentro”, recuerda la mujer muy afectada. “Ella tenía el niño en los brazos y yo se lo quité porque estaba dándose tortas (...)   pedí un trapo con agua para limpiarle la cara al niño”.


Sus intentos por socorrer a la víctima eran infructuosos. El menor sufrió un fuerte impacto en la cabeza, en la zona frontal, sangraba de forma aparatosa y tenía problemas para respirar. “Un guardia civil entró, lo colocó en el sofá y le hizo el boca a boca, pero no pudo reanimarlo”.


Unos minutos antes de la irrupción de las patrullas de la Guardia Civil y la Policía Local de Níjar en la calle Virgen María, la vecina se cruzó con Hicham, principal sospechoso de la muerte del bebé de 45 días de vida. “Cuando iba hacia la casa, el padre estaba aquí, en el coche subido”, detalla. “Yo iba preguntándole a los niños qué había pasado y me dijeron que se habían peleado; entonces, desde el coche el padre me dijo: ‘!Llamad a una ambulancia, llamad a una ambulancia!’ ”, señala la mujer. “Mi hijo llamó a la ambulancia y a la Policía, pero la ambulancia no llegó a tiempo y la Guardia Civil se llevó al niño al médico”.


El menor ingresó en el centro de salud de la Villa de Níjar, donde los médicos apenas pudieron certificar la muerte. El levantamiento de cuerpo por parte de la autoridad judicial se hizo en ese emplazamiento.


Por otra parte, la testigo aporta detalles sobre la presunta autoría de la agresión que se añadirán a las diligencias. “Decía que su madre le había dicho que dejara al hombre: ‘Mi madre me decía que al niño lo iba a matar, que lo dejara, que al niño lo mataba’. La muchacha estaba desesperada, llorando y se pegaba bofetadas en la cara. Yo le decía: ‘¡No hagas eso, que te vas a hacer daño tú también!’ La mujer estaba loca, lógico. Una lástima, un niño con sólo 45 días...”, concluye.


Condolencias de la alcaldesa
La alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez (PSOE), se personó en el Residencial Campohermoso la tarde del viernes para conocer de primera mano las circunstancias del presunto crimen y rechazó este episodio de violencia familiar. “Lamentamos profundamente un hecho de esta envergadura, hablamos de un niño de sólo 45 días de vida”, señaló la regidora.


Pérez mostró sus condolencias y pidió prudencia. “Todavía hay cierta confusión sobre lo sucedido; desde el Ayuntamiento de Níjar vamos a esperar a tener los datos oficiales para poder trasladarlos”. Sobre posibles actos institucionales, la alcaldesa apeló a la evolución de la investigación y prefirió no pronunciarse hasta conocer mayores detalles sobre el suceso.



Temas relacionados

para ti

en destaque