Llega la canícula y los termómetros podrían subir a más de 40 grados

Una ‘vaguada ‘propiciará la entrada de aire tropical. Hará mucho calor hasta el viernes

El termómetro podría superar los 40 grados a principios de esta semana.
El termómetro podría superar los 40 grados a principios de esta semana.
Antonio Fernández
13:45 • 16 jul. 2016

Almería afronta desde hoy la que podría ser la semana más calurosa de este verano, con temperaturas que en varios puntos de la provincia podrían incluso superar los 40 grados. Según explica el experto en climatología Eduardo Romay ‘’Vigorro’ la situación de una vaguada al oesta de la península, frente a Portugal, va a favorecer la entrada, a todos los niveles atmosféricos, de una masa de aire tropical continental, con origen en el norte de África.
A esa entrada de aire caliente se unirá la insolación máxima de estas fechas, ya tradicional en Almería, y a una gran estabilidad de la masa de aire tropical, “lo que dará lugar a un episodio muy cálido”.




Los vientos Que el mercurio se dispare dependerá en gran medida, como siempre, de la presencia o no de viento de levante que, al menos para este domingo y maña lunes si estará presente, según la previsión de Romay. Con esa perspectiva las máximas subirán por encima de los 35 grados, incluso el martes, y en el interior serán sobre todo el miércoles y el jueves los días de más calor, con el poniente recalentando sobre todo los valles interiores como los del Andarax, Nacimiento y Almanzora.




 En la zona del Levante provincial, debido al efecto terral que presentan en ese área los vientos de poniente, hará mucho calor, con temperaturas que podrían superar incluso los 40 grados centígrados, Le buena noticia es que probablemente el viernes ese fuerte calor irá remitiendo.




Tiempo de calor  Así que el calor será agobiante durante la mayor parte de la semana, algo que tampoco es sorprendente porque es en estos días de finales del mes de julio, y en los primeros de agosto, cuando Almería suele alcanzar sus máximos anuales, aunque quizá este año se ha adelantado unos días, sobre todo por el efecto de las escasa precipitaciones y la fuerte insolación acumulada.




Históricamente la semana diurna más cálida del año en la provincia es la que abarca del 31 de julio al 6 de agosto, mientras que la nocturna de mayor calor es la del 30 de julio al 5 de agosto. En cuanto a las quincenas, las que mayor temperatura abarcan del 28 de julio al 11 de agosto, en lo que se refiere a los días, y del 2 de agosto al 16 de ese mes en cuanto a las nocturnas.




Respiro en julio Y el caso es que el mes de julio ha tenido un talante moderado en casi toda la provincia, salvo por algunos ‘picos’ de máximas en días aislados. Esta última semana las máximas han estado en el entorno de los 28 a 30 grados, con mínimas de 21 en la capital o 23 en Albox, Huércal Overa, Carboneras, Almería, Roquetas o El Ejido. En tierras más altas las mínimas han llegado a ser más que llevaderas para entrar en la categoría de fresquitas por las noches. Es el caso de las vividas en localidades como Abra, Ohanes o Tahal, donde los termómetros han registrado temperaturas de 16 o 17 grados como máximo.




Verano Eduardo Romay explica que aunque la tierra alcanza su afelio (momento más alejado del sol) a primeros de julio y su parhelio (momento más cercano al sol) a principos de enero, son julio y agosto nuestros meses veraniegos porque la temperatura no depende de la distancia al astro rey, sino de la inclinación con que sus rayos inciden sobre nosotros, y es en julio y en agosto cuando la Tierra está menos inclinada y cuando los rayos inciden más verticalmente sobre el hemisferio norte y, por tanto, cuando más calientan.




La canícula  debería darse a primeros de julio, cuando más verticalmente inciden sobre nosotros, pero se retrasa un poco porque en esas fechas el mar aún no se ha calentado mucho y mantiene algo del fresco de la primavera, ejerciendo un efecto termorregulador. También influye que la tierra tiende a acumular calor, con lo que a finales de julio lleva casi un mes acumulándolo. Desde mediados de agosto ese efecto se va compensando con días más cortos y con los rayos del sol cayendo más oblicuos.



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