Berja

Tapia deja la política con una Balanegra independiente a punto de ser realidad

La alcaldesa de la ELA anuncia que no se presentará a las próximas elecciones municipales

Mercedes Tapia en una reciente reunión en Madrid.
Mercedes Tapia en una reciente reunión en Madrid.
Eva de la Torre
22:20 • 02 mar. 2015

Cuando se van a cumplir diez años desde que se presentará por primera vez la solicitud de segregación de Berja de la Entidad Local Autónoma de Balanegra, su alcaldesa ha anunciado su intención de abandonar la política y no presentarse a la reelección en las próximas elecciones municipales que se celebran el mes de mayo.

Eso sí, todo apunta a que cuando se marche, Mercedes Tapia podrá decir eso de ‘misión cumplida’.

La razón de ser de su presencia al frente de la ELA durante todos estos años, la segregación de Berja y su constitución como municipio independiente, está a punto de convertirse en una realidad y por eso, y “porque ya son muchos años,llevo aquí desde 10996, y hay que dejar entrar a gente nueva” Tapia ha decidido dar un paso atrás y abandonar la política.

“Ha llegado mi hora”, afirma contundente a la Cadena SER, e insiste en que hay que tener claro que “la política no es para toda la vida”.
Aunque la alcaldesa no quiere cantar victoria, reconoce que todos los informes respecto a la segregación de Balanegra son positivos. De hecho, Dirección General de la Administración Local de la Junta y la Secretaría General Técnica de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales han dado el visto bueno al proceso, de forma que solo queda el informe del gabinete jurídico en relación al decreto que aprobará la segregación.




Junio de 2005
El proceso comenzó en 2004, pero fue el 8 de junio de 2005 cuando se presentó la petición formal de independencia. “Entré para luchar por la segregación. Yo no tenía intención de meterme en política”, recuerda Tapia, quien asegura que “he sido una trabajadora incansable. Lo haré mejor o peor, pero todo lo he hecho por mi pueblo”.

La alcaldesa defiende la necesidad de que Balanegra, con más de 2.500 habitantes, sea un municipio porque “la capacidad de desarrollo que tenemos es muy importante y ser independientes va a venir muy bien para lograrlo”. Tapia destaca el hecho de que “aquí no existe paro en la agricultura” y “este rincón por descubrir tiene un potencial turístico enorme”.

Pero para poder poner a Balanegra en el lugar que su alcaldesa está convencida que se merece, insiste en que se necesita ser un municipio. “La recaudación de impuestos no la hace Balanegra, el reparto de fondos desde Estado   y la JUnta provenientes de los impuestos o por el número de habitantes no los recibe directamente Balanegra, por eso ha sido tan duro trabajar por el pueblo todos estos años, no teníamos los medios”, sentencia Mercedes Tapia, quien reconoce que ha llamado a todas las puertas y todos, “sean del color que sean” le han escuhado.




“No soy Artur Mas”
Cuando Mercedes Tapia comenzó a pelear por la segregació de su pueblo, hubo gente que comparó sus deseos de independencia con los de Cataluña. “Es verdad, me han atacado por ahí y han querido compararnos. Por eso, yo siempre les he dicho que Balanegra no es Cataluña y yo no soy Artur Mas”. Tapia lo tiene claro, el proceso de segregción de la ELA está recogido por la ley, “lo de Cataluña no está en ningún lado”, afirma.

Tapia espera marcharse con la satisfacción de dejar a su pueblo independiente, pero en cualquier caso, cree que  Balanegra está ahora mejor que cuando llegó “solo tenéis que ver el Paseo de Nerea Camacho” y que tiene “un enorme potencial de desarrollo”.




Del encierro a la huelga de hambre
A lo largo de los años que Mercedes Tapia ha estado al frente del gobierno de Balanegra, ha peleado por lo que ella consideraba los derechos de su pueblo. Así, en septiembre de 2004 se encerró en el Ayuntamiento para pedir que se duplicara la cantidad que el presupuesto de Berja destinaba a la ELA. Tras más de 20 días de encierro, anunció una huelga de hambre que abandonó unos días después cuando fue desalojada del ayuntamiento. Dos años después, Tapia iniciaba otra huelga de hambre contra de la oficina municipal que el ayuntamiento de Berja había abierto en la localidad. En estas ocasiones, Tapia siempre contó con el apoyo de los vecinos.




 







Temas relacionados

para ti

en destaque