Miguel Rivera y un trabajo de sol a sol

Siempre se trabaja mejor con una sonrisa. Miguel Rivera tiene doble ración con filial y primer equipo. De sol a sol pensando en dos partidos al mismo tiempo: Girona y Marbella. A las 10:30 horas, en el Juan Rojas, el malagueño se ‘encerró’ con los canteranos en el vestuario para ver vídeos del conjunto marbellí y preparar en tiempo récord el encuentro del domingo. Cuenta con dos ayudantes que para él “son los mejores”, Eduardo Frapolli y Ricardo Molina. Ambos se sentarán el domingo en el banquillo del Mediterráneo.

A Rivera le tocó madrugar, pero no hay quien le pueda quitar la satisfacción de volver a dirigir al primer equipo. Una persona optimista, para la que el fútbol es más que un deporte, y a la que no le importa tener que estudiar a dos rivales en menos de una semana. “Todo sea por el bien del club”, afirma.

Habló por la mañana con Joaquín Fernández y Charlie Took, ya que fueron convocados para la sesión vespertina con el primer equipo. También tuvo una pequeña charla con el capitán Carlos Selfa, que no termina de recuperarse una lesión muscular. Parece imposible que el centrocampista entre en la lista de convocados. Junto a su inseparable libreta, Rivera tomó el mando de las operaciones tras el calentamiento.