Apuesta de los regantes por la energía solar para rebajar el precio del agua desalada

La extinción del cupo de riego con aguas procedentes del trasvase Tajo-Segura ha dado la voz de alarma entre los regantes que ven cómo las restricciones llegan en un momento en el que las necesidades hídricas han  crecido en el inicio de la campaña hortofrutícola.

Una alarma que tiene especial incidencia en la zona del Almanzora, en la que se arrastra desde hace ya varios meses una sequía que es consecuencia de la escasez de precipitaciones durante el primer semestre de este año. Ante la falta de recursos la desalación parece la única alternativa válida, aunque el coste del agua desalada supone un duro revés para la estructura de costes de las explotaciones, según ha denunciado reiteradamente la Federación de Regantes de Almería, Feral.

Fotovoltáica
En ese escenario se abre paso la idea de utilizar las energías renovables, y más concretamente la solar fotovoltáica, para alimentar las plantas desaladoras. Un estudio llevado a cabo por la Fundación Desarrollo Sostenible revela que el ahorro en los costes energéticos derivados del uso de renovables se sitúa entre un 40 y un 60 por ciento.

Esta y otras cuestiones han estado presentes en la reunión que han mantenido esta semana los técnicos de esta fundación con la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed). El objetivo no es otro que lograr una reducción del coste del agua desalada que estaría inicialmente en el entorno del 40 o el 45 por ciento.

Sobre la mesa se expuso el informe que indica que con la instalación de módulos fotovoltáicos el gasto energético para desalinizar el agua se abarataría hasta un 60%, reduciejndo a 2 céntimos el precio del kilovatio. “Así el agua desalada podría venderse en planta a 25 céntimos de euros, un 40% más barato”.
Los regantes de Almería y Murcia apuestan por esta opción ante la dificultad para pagar los precios actuales de entre 0,50 y 0,70 euros por metro cúbico de agua.