Cuatro cuchilladas en la cara y el cuello para incriminar a su ex pareja

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería ha absuelto a un vecino de Carboneras acusado de un delito de lesiones a su ex compañera sentimental  en noviembre de 2013. La mujer sufrió cuatro cuchilladas en el cuello y la cara, pero el tribunal acoge la versión de la defensa y apunta a lesiones autoinfligidas durante una discusión con el acusado y un amigo, también liberado de responsabilidades en la causa.

El acusado, de origen subsahariano y vinculado al sector pesquero, presentó una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Carboneras por un supuesto acoso de su ex mujer, con la que había roto la relación sentimental dos meses antes. Según su testimonio, esa mañana su ex pareja se presentó en su casa y le pidió dinero y una documentación vinculada a la autorización de residencia. Tras una discusión verbal, según su versión, se presentó ante la Benemérita para denunciar el hostigamiento.

Sin embargo, el asunto tornó en sólo unos minutos en un caso de violencia de género porque la supuesta víctima, desde la casa, alertó de una dura agresión. Los agentes de la Guardia Civil se personaron en el inmueble y encontraron a la mujer herida en la cara. “Los agentes la  encontraron en el suelo de la cocina, tumbada boca arriba, con diversos cortes alrededor del cuello”, señala la sentencia de la Audiencia Provincial de Almería.

El Instituto Armado alertó a los servicios de emergencias sanitarias y la mujer ingresó con cuatro heridas incisas en el cuello y las mejillas realizadas con una cuchilla o un objeto sumamente afilado. Según la denunciante, su ex pareja la zarandeó y rompió un vaso de cristal. Los trozos habrían causado las lesiones en el rostro.

Las cuatro cicatrices, según los informes médicos periciales, suponen “un perjuicio estético valorado como medio” para la mujer. Se inició un proceso judicial contra el acusado y su amigo y el caso llegó a la Audiencia Provincial de Almería. El Ministerio Fiscal y la acusación particular solicitó  cinco y cuatro años de prisión para los acusados por un delito de lesiones, así como una indemnización económica por los daños ocasionados a la víctimas, también residente en Carboneras.

Sin embargo, una sentencia de la Sección Tercera, con la magistrada Esther Marruecos como ponente, absuelve a los procesados y acoge la versión de lesiones autoinfligidas. ¿Con qué elementos? En primer lugar, el tribunal encuentra “contradicciones” en la versión de la denunciante “que, contrastadas además con las restantes diligencias probatorias,  aportan datos contrarios a las manifestaciones” de la mujer.

Sin restos ni sangre
En segundo lugar, los informes de la Guardia Civil cuestionan la secuencia de hechos. “No se halló ningún tipo de arma blanca, ni objeto punzante, inexistencia de cristales o vaso fracturado, sin signos de violencia en el mobiliario de la cocina ni en el resto de habitaciones del domicilio, no encontrando restos de sangre, ni cristales en la terraza, sin advertir tampoco signos de violencia en la misma, observando restos de sangre en el suelo donde la víctima se encontraba tirada”, enumera el tribunal.

Más aún, en la declaración de dichos agentes “ambos afirman de forma contundente, que no había más restos de sangre, que donde la denunciante se hallaba tumbada, que  registraron la vivienda pero no encontraron nada, observaron los cuchillos y no había ningún resto, miraron  la basura, recogedor, en los alrededores, que no encontraron ningún objeto punzante, ni restos de cristales, no había signos de violencia, ni rastros de sangre”, continúa la resolución.
Según la versión estimada por el tribunal y defendida por el acusado durante todas sus declaraciones, “las lesiones se las causó ella misma”. La Audiencia Provincial absuelve a los dos procesados por lesiones.