De camino carretero a autovía: un kilómetro cada tres años

La vieja carretera Vera-Garrucha se ha convertido en una Autovía. No ha sido fácil: han sido años de molestias para los conductores, de polvo y paja, de frenazos, de  ver desde la ventanilla a obreros con la aplanadora, rociando el alquitrán caliente; han sido años de espera que te espera, para que la Vera- Garrucha, que empezó siendo camino de arrieros que llevaban el pescado desde la playa hasta el Almanzora, sea una vía moderna.

Atrás quedan los años en los que fue solo un camino carretero para tartanas, después como carretera de segunda por donde  transitaba La Caita llevando mujeres al mercado de los sábados y a estudiantes al Instituto, dejando atrás el puente del río Antas, la Media Legua y todo ese camino carcomido por el sol. La historia de Vera y de Garrucha es la historia de esa ruta que tanto los ha unido desde siempre.