Nepotismo corrupto

Los medios y ciertos partidos políticos han saltado cual resorte por el nombramiento de Rodrigo Rato como consejero de Telefónica. No entiendo tal espanto, si nos ceñimos a la historia desde 1700, principio de la dinastía borbónica, es lo habitual, se inicia con la entrega de Gibraltar a Inglaterra por su apoyo frente a los Austrias, más de trecientos años de corruptelas , salvo honrosas excepciones, algunos ejemplos de Nepotismo en los últimos los últimos 150 años, son: La  Iglesia, Los Rato, Los Fabra, la monarquía, Esperanza Aguirre  y  Gil de Biedma,  Los Baltar, José María Aznar, Felipe González, Francisco Enrique Camps.

La corrupción  y el nepotismo continúa también con miles de familiares de políticos enchufados en todos los estamentos públicos, con  la seguridad que una gran mayoría no se verá afectada por las medidas contra los funcionarios. Según cifras de la prensa escrita, más de 300 políticos están imputados en presuntos casos de corrupción por el territorio de todas las comunidades autónomas, sólo en el arco mediterráneo, con Baleares y la Comunidad Valenciana a la cabeza, muchos siguen en sus cargos. Además, están en marcha investigaciones sobre la gestión de distintas entidades financieras como Bankia o la CAM, de cuyos consejos formaban parte diversos políticos. Si añadimos la denuncia presentada por Democracia Ya, a 63 diputados que cobran dietas pese a tener casa en Madrid. Entre ellos ministros y el propio presidente de gobierno.

Y los gobiernos para proteger a su casta política, financiera, o aquellos que les sirven y son condenados si no han prescritos los delitos por la demora en triquiñuelas jurídicas o judiciales, usan el privilegio del indulto, como han hecho con banqueros, alcaldes acusados por prevaricación o malversación de fondos públicos, mossos... excarcelan a Carromero, sueltan a los integrantes de la operación Emperador, condonan a los evasores de capitales y sigue una larga lista de casos.

Pero mantienen en prisión a Alfons, multan a los manifestantes del Congreso, condenan a la pobreza a la ciudadanía en general con sus medidas restrictivas, copagos, repagos y privatización de todos los mecanismos del Bienestar Social, pagados con nuestros impuestos.

Necesitamos otra forma de Estado, un Estado participativo, que evite todo tipo de privilegios y delitos por la élite política o financiera.