El talento de Libeskind queda para la historia en Cosentino

Un pedazo de historia de la arquitectura contemporánea reposa ya en tierras almerienses. Lo hace en la sede central de Cosentino, en Cantoria, donde ayer se inauguró la escultura del reconocido arquitecto Daniel Libeskind (Polonia, 67 años), estrella mundial de la nueva arquitectura.

El trabajo del veterano arquitecto ha sido bautizado como ‘Beyond The Wall’’ y está situado en el lugar donde nació el material que ha sido utilizado; junto a la planta industrial de Dekton, el nuevo producto de la empresa almeriense que Libeskind ha aprovechado en esta singular estructura. La inauguración ha contado con la presencia de su autor, que ha estado acompañado en todo momento por el presidente de la compañía multinacional, Francisco Martínez-Cosentino.

Colaboración

Ha sido Daniel Libeskind junto a Martínez-Cosentino quienes se han encargado de cortar la cinta que inauguraba este trabajo, resultado de la colaboración que mantienen el estudio de ‘Libeskind Designe’ y el Grupo Cosentino.

La obra, con forma de espiral, se abre con múltiples direcciones y muchas trayectorias. Se trata de una espiral policéntrica que se proyecta con energía hasta un cénit dramático. Expresión artística forjada con Dekton.
Y es que el nuevo producto de Cosentino está presente en todas las fachadas exteriores, muros interiores y en todos los suelos de ‘Beyond The Wall’. La gama más blanca, llamada ‘Zenith’, ha sido la elegida para fachadas y paredes, contrastando con el negro perfecto de ‘Sirios’, que ha sido el seleccionado para los suelos de la impresionante espiral policéntrica de 8,5 metros de altura.

Toda una obra de arte que preside la zona donde se produce Dekton y que, para más espectáculo, ofrece al visitante la posibilidad de adentrarse en ella y admirar desde dentro la creación de Daniel Libeskind.

La puesta de largo del monumento se produjo tras un recorrido por la nueva fábrica de Dekton. Una visita en la que profesionales de la empresa y el propio presidente de la misma han indicado a Libeskind, paso por paso, el proceso de elaboración de este material desde las entrañas de una fábrica que ha supuesto una inversión de 128 millones de euros.

De esta planta salió la materia prima que ha permitido levantar la obra de arte, “un mosaico matemático, una red móvil que discurre y que se desintegra sin repetirse: un concepto absolutamente moderno de tabla, un ‘fractil’”, según se ha explicado la empresa almeriense. El objetivo es encontrar una semejanza en la obra que nunca se repite del todo.

Confidencias

El día que pasará a la historia de la arquitectura de la provincia también permitió a un buen número de profesionales del sector compartir con el invitado de excepción unos minutos de charla. El arquitecto quedó impresionado con el trabajo de la empresa y su nuevo producto. No fueron simples palabras amables ante los micrófonos las que dan fe de este hecho.

Antes de poner el primer pie en las escaleras del autobús que le llevaría de vuelta a las oficinas tras conocer la planta, Daniel Libeskind se dirigió en voz baja a uno de sus acompañantes con un “Wow, it’s so interesting (guau, esto es muy interesante)”. Una confesión que muestra la admiración mutua entre dos referentes de la arquitectura mundial: Daniel Libeskind y Cosentino.