Teniente General Cassinello: "El libro sobre el 23F es una total desvergüenza, nauseabundo”

“Es infame, una maldad, una desvergüenza, desleal con todos (...) nauseabundo”. El siempre templado e impecable en las formas teniente general Andrés Cassinello (Almería, 1927), uno de los hombres relevantes de la Transición española, no ahorra en descalificaciones para el libro La gran desmemoria, de la periodista Pilar Urbano.
Está indignado -y lo enfatizan su tono y sus palabras- con la publicación de un relato pretendidamente de investigación que cuestiona el papel del Rey y del expresidente Adolfo Suárez en el intento de golpe de Estado del 23F, así comolas relaciones entre ambos. Cassinello era enesas fechas jefe del Servicio de Información de la Guardia Civil y fue el director de los servicios secretos durante los gobiernos de Suárez, uno de los hombres que mejor conoce los secretos de la Transición española. Y desde ese conocimiento, reservado a muy pocos, de las entrañas del Estado, rechaza tajantemente dar cualquier credibilidad a las afirmaciones del libro de Urbano. “De ninguna de las maneras estoy de acuerdo con lo que dice”, argumentaba ayer en declaraciones a La Voz de Almería el teniente general Cassinello que, aunque admite  no haber leído el libro, subraya que nada de lo que se ha difundido sobre el contenido responde a la verdad.
“Es una absoluta maldad, apoyarse en testimonios de personas que han muerto ya y que no pueden desmentirlo constituye una desvergüenza total”, precisa el teniente general. Se refiere a personas, civiles y militares, citados en el libro como fuentes de autoridad, de algunos de los cuales se relata que pasaron por la Zarzuela la noche del 23F. Andrés Cassinello tiene claro que hubo un momento determinante que evitó el triunfo del golpe. “Se paró cuando Quintana Lacaci  [capitán general de  Madrid] ordenó a la División Acorazada Brunete que regresara al acuartelamiento [habían salido para tomar Madrid por orden de Milan de Bosch]. Si llegan a entrar, el golpe triunfa”, resalta.
Y defiende absolutamente el papel del Rey en la defensa del orden constitucional y la democracia frente a la afirmación de Urbano de que el monarca pudo haber inspirado antes del 23F la sustitución de Adolfo Suárez por un Gobierno que presidiera el general Armada. “A mi todo esto me duele, me parece una falta de respeto a lo que se consiguió... Sinceramente, no entiendo a cuento de qué viene porque es desleal con todos”. “No puedo ni imaginarme qué se plantea, ¿es afán de protagonismo?”, se pregunta. Y remacha: “han sido los primeros 40 años de paz en España. Nadie quiere terminar con ello”.