“Me salvaron la vida y lucharon por la de mi padre”

Los hechos ocurridos en dos playas del Cabo de Gata el 16  de agosto han puesto de relieve la valentía y solidaridad de muchas personas anónimas que les tocó vivir los trágicos acontecimientos.

Al testimonio del socorrista que, cumpliendo con su trabajo, pero poniendo en peligro su vida, salvó a uno de los jóvenes que se tiraron en Los Escullos, se sumó el de una joven que participó en el rescate del turista polaco que se ahogó en la Cala del Plomo. Ahora podemos leer el de la hija de este hombre.

Marta, que así se llama, ha dejado, a través del Facebook de LA VOZ, una estremecedora carta en la que quiere agradecer a todos los que allí estaban lo que hiceron por ella y por su padre. Estas son sus palabras: “Me salvaron la vida a mí y lucharon por la de mi padre. Cuando vi que mi padre se estaba ahogando me metí en las olas para ayudarle. Ahora sé que gesto solo me sirvió para una cosa: evitar que mi padre muriera solo en esas olas.

Supo que estuve allí con él. Pero no sé que habría pasado a partir de ese momento si no fuera por la gente que estuvo en esa playa. No sé si sobreviviría yo. Fueron hombres y mujeres valientes, verdaderos héroes y heroínas que sacaron del agua a mi padre y a mí. Las personas que estuvieron en las olas con nosotros y las personas que formaron una cadena humana para sacarnos a la orilla. Después varias personas estuvieron reanimando a mi padre durante un tiempo que a mí me pareció una eternidad: sin parar”. “Mientras ocurría todo eso delante de mí y de mi madre, otras personas cuidaron de nosotras: sin parar".

"Mi padre perdió la vida en esa playa. Pero a mí me salvaron la vida las personas que fueron a por mí. A mi madre le salvaron la vida las personas que agarraron con todas sus fuerzas a una mujer desesperada viendo su marido e hija luchando contra las olas”.

“Mi padre murió en esa playa. No culpo a nadie de eso. Fue un hombre adulto que como tantas otras personas que están de vacaciones, decidió darse un baño en una playa maravillosa. Es triste y trágico porque era un buen nadador y de joven fue socorrista. Pero eso es otra historia. Lo que pretendo con esta llamada es dar las GRACIAS de todo mi corazón a los héroes y heroínas de la Cala del Plomo que estuvieron allí el 16 de agosto de 2014”.

Marta acaba dando de nuevos las gracias y afirma que “tenéis que saber que lo que hicisteis allí es un acto de humanidad en su puro estado”.