La Mesa del Agua demanda ayuda y advierte que la situación es ‘crítica’

Ayer quedaba formalmente constituida en Almería la Mesa del Agua, un foro que pretende hacer frente al primero de los problemas de la economía provincial, y especialmente de la agraria, la escasez de recursos y el agotamiento de los disponibles.

La alianza de regantes, empresarios, agricultores y técnicos mirará cara a cara a las administraciones públicas en busca de respuestas y advierten que están dispuestos a pelear. Como decía el presidente de Asempal, José Cano, queremos lo que nos toca, lo que nos pertenece, porque lo hemos pagado”.

Soluciones
El presidente de la Federación de Regantes de Almería, y también de la Mesa del Agua, José Antonio Fernández, explicaba que el momento actual es crítico, y marcaba los objetivos prioritarios que se han propuesto, basados en una buena gestión del agua, en la obtención de nuevos recursos vía inversiones y en conseguir un precio único del agua que no penalice a los productores almerienses frente a los de otras provincias próximas.

A esta aventura se han sumado La Federación de Regantes de Almería (FERAL), Asempal, Aguas del Almanzora, Junta Central de Usuarios de Agua del Valle del Almanzora, Comunidad de Usuarios del Campo de Níjar, Comunidad General de Usuarios de Aguas Depuradas, Junta Central de Usuarios del Poniente, Junta Central de Usuarios de Adra, Asociación de Regantes de Andalucía. Regantes de Almería, las organizaciones agrarias Coag, Asaja y Upa, y el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Almería, es decir la inmensa mayoría de los regantes y agricultores de la provincia, un colectivo que peleará por el agua y recabará más apoyos para hacerlo.

Situación crítica
Hay coincidencia a la hora de valorar la situación actual en la que los riegos no están garantizados en varias zonas, desde el Almanzora hasta el Poniente, por la falta de recursos, por las escasas reservas de los pantanos (Benínar está al 8% de su capacidad, Cuevas apenas llega al 6%), por la escasa dotación que sale de las plantas desaladoras y por un año hidrológico simplemente criminal, el peor de la última década, como mínimo.

La idea es convertirse en un grupo de presión y buscar la colaboración de las administraciones. Fernández afirma que no buscan  pelea con las administraciones, “sino poder hablar con ellos, buscar soluciones y llegar a acuerdos que nos permitan salir de la dramática situación actual”.

La Mesa entiende que los agricultores ya han hecho un enorme esfuerzo económico para adoptar todo tipo de medidas y técnicas de ahorro de agua en sus explotaciones. Ahora buscarán tener respuestas de unas administraciones que no acaban de dar el paso adelante para solventar los déficits. Quieren que Almería deje de ser la gran olvidada, también con el agua.