Junta o Diputación: una de las dos tendría que desaparecer

Desaparecer unas de las dos o que tuvieran las competencias definidas y no participativas. Cada vez que la Junta se inventa una historia, la que sea, busca la colaboración de la diputación y al final acaban a la gresca. O desaparece una de las dos, o que no se busquen. Que cada una diseñe sus “puñeteras” historias y no les busquen problemas a los ciudadanos, que es como acaban el ciento por ciento de las programadas. Ayer era la residencia asistida, hoy los guadalinfos. No hay día en que no aparezca una nueva batalla entre ellos, y siempre anda el dinero de por medio. ¡Que si me debes tú, que si te pago yo, que si no has pagado tú, que si ya he pagado yo! Son cansinos estos señores. No deben tener mucho trabajo que hacer los caballeros, y se entretienen con sus cuitas y sus guerras de barquitos. Y los ciudadanos pagando el pato de sus señorías y sus sueldos. Asistimos atónitos a los enfrentamientos entre los delegados de Susana y los diputados de Amat y sólo se nos ocurre una solución: Que desaparezca una de las dos administraciones o que diputación no acepte ni una de las historias que se inventa la Junta. ¿No sería mejor que cada una se hiciera responsable de sus programas y proyectos? Así no podrían taparse las vergüenzas entre ellos, que es lo que vienen haciendo con total descaro.
Se inventa la Junta los Centros Guadalinfos para los pueblos de menos de 20.000 habitantes y busca la colaboración de las diputaciones, estas no tienen más remedio que entrar, pues en caso contrario temen quedarse descolgadas en los pueblos, y una vez que se han enredado en la maraña empiezan los problemas, todos ellos por culpa del vil euro. Y al cabo de algún tiempo se van cerrando los centros. Diputación dice que la Junta no cumple con su parte, la Junta que es la administración provincial. Y los centros, ese gran invento, clausurados andan en muchos pueblos. Son inigualables los políticos a la hora de gestionar. Insisto, una de las dos tiene que desaparecer. Ya está bien de que tengamos que pagar las duplicidades políticas de las administraciones. O cierran una de ellas o definen sus competencias. Que digo duplicidades, existe un delegado de agricultura de Susana, un diputado en la misma actividad de Amat y un concejal en esa responsabilidad hasta en el ayuntamiento más pequeño.