Sergio Ramos anotó el segundo gol del Real Madrid ante el Sevilla para poner el 3-2 en el marcador en el minuto 83. El central de Camas anotó de penalti y lo ejecutó de Panenka y luego lo celebró desafiando a los 'Biris', el grupo ultra que anima al conjunto hispalense, señalando su dorsal.
El futbolista blanco celebró su tanto por los insultos que recibió de este sector de la grada del Ramón Sánchez Pizjuán, entre los que se escucharon "Sergio Ramos muérete" y pidió perdón al resto del estadio. Aún así los aficionados del Sevilla no se lo tomaron bien -su equipo estaba cayendo en octavos de Copa del Rey ante el Madrid- y pitaron al sevillano el resto del partido.
A la afición sevillista no le sentó bien que un ex jugador de su club como Sergio Ramos la tomara así con la afición y gran parte del estadio siguió insultándole y deseándole la muerte al camero. Sin duda lo recordarán el domingo en el próximo partido liguero que tendrá lugar en casa del Sevilla.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/6/deportes/121317/sergio-ramos-explota