El Assy: “Nunca volveremos a Segunda”

Lo dijo antes de subir a Primera. Lo dijo tras el ascenso, Lo dijo cuando el equipo se salvó de milagro y al inicio de la pasada temporada. Hasta con el Almería colista el pasado otoño en su penúltima rueda de prensa seguía en sus trece asegurando que: "Nunca volveremos a Segunda". Y lo puso todo para que no pasara pero el fútbol no son matemáticas pese a que los clubes sean empresas. Con la mayor inversión de todos los tiempos este sábado el Almería puede bajar matemáticamente a Segunda División y la promesa de El Assy no se va a cumplir. Suele pasar en el fútbol porque si miramos la clasificación de LaLiga de la mitad de la tabla para abajo el que no haya bajado alguna vez que tire la primera piedra. Competir en la élite no es fácil y siempre descienden tres equipos y en la temporada de los registros más bajos para salvarse va el Almería y firma su peor ciclo en la élite.

Muchos hubieran dicho lo de El Assy viendo todo el poder y la gloria de un presidente al que el dinero no le falta. Todos firmarían lo que hizo el Almería desde la llegada de Turki y el descenso debe servir de lección para todos, incluido el CEO que no se debe de aventurar en el fútbol porque no son matemáticas y puede pasar que su Almería vuelva a Segunda.

Todos hubiesen firmado un ciclo como el actual en el Almería con la primera piedra del nuevo campo puesta, terrenos para la Academia de sobra y un patrimonio en futbolistas que le permite al club ganar dinero en cada ventana de mercado. Todo ha sido positivo y el descenso tiene sus peligros pero suele pasar por mucho dinero que inviertas en una plantilla y promesas que hagas.

Valiente

El CEO del Almería es un hombre decidido que habla claro. Hizo una promesa en esos momentos de gloria donde cuesta mirar hacia abajo y se equivocó. Le hará más fuerte y seguro que no se vuelve a apostar nada cuando de balompié se trate. Si en matemáticas saca sobresaliente en fútbol ha suspendido y mejor que vaya con tacto a la próxima promesa que seguro tardará en realizarla. Su puesto no peligra por mucha promesa incumplida y sigue siendo el jefe del Almería en Europa. Mantiene toda la confianza del presidente y ministro de Arabia Saudí y nada va a cambiar de cara al futuro, bueno sí, que ya no volverá a apostar por su plantilla por mucho gasto realizado en la misma dado que nada te garantiza cumplir con tu promesa. Sabe El Assy que se equivocó y toca asimilar el descenso y partir de nuevo.

Inversión

En Almería no se ha conocido nada parecido desde que el CEO tomaba el mando. Todo lo ha prometido lo ha cumplido hasta la presente temporada donde además de no poder cumplir con su promesa deportiva el descenso ha salpicado a las infraestructuras futuras del club. Las obras de la Fase2 quedan aparcadas y el inicio de la Academia no tiene fecha fijada. Toca empezar de nuevo que no desde cero porque se ha invertido mucho en el campo, se ha dotado al club de infraestructura y se tiene un patrimonio en jugadores que le garantiza larga vida. Como empresa el Almería es un club modelo y nada que objetar a la gestión de su consejero delegado porque hay mucho terreno avanzado y si se logra volver a Primera será con la experiencia adquirida tras un descenso que lo ha cambiado todo y ha frenado el camino hacia Europa.

Realidad

Ahora lo que toca es asimilar el descenso desde la humildad, recuperar el dinero invertido con la venta de jugadores y apostar por una plantilla que garantice estar entre los mejores para pelear el ascenso. La Segunda es una caja de bombas y te puedes caer de LaLiga y eso sería entrar en un terreno desconocido para el club. Asimilar el paso atrás y tomar impulso es lo que le queda al CEO del Almería que va a continuar confiando en el director único deportivo, Joâo Gonçalves, que es una máquina de hacer dinero en la compra-venta de futbolistas. Turki sigue confiando en El Assy y Gonçalves para que sigan dando brillo a su apuesta en España.

Las promesas están para cumplirlas pero...