¡Bendito sea Dios!

Todo pasa por salvar la Liga Profesional. No podemos meternos de nuevo en el túnel del tiempo y parece que los jugadores y el cuerpo técnico han recibido el mensaje de Alfonso García.

En Elche se ganó como un equipo y se tuvo capacidad de reacción. Se volvía a encajar gol pero lo importante es que el Almería ha aprendido a vivir en Segunda sumando puntos.

Estamos fuera del descenso y exclamé cuando pitó el colegido el final: ¡Bendito sea Dios! grité por Almería entera porque nadie quiere ver al club de nuestra provincia por los campos de bronce.

No se hizo nada. Es verdad. No debemos mirar hacia atrás: ya no vale. Lo único importante ahora es no volver a pisar la zona de descenso y seguir adelante con todos los proyectos.

No me importa como se jugó ni el resultado. Se me acaba de olvidar porque lo verdaderamente importante ahora es sumar de tres en tres y llenar la talega. No va a ser fácil pero se puede conseguir.

El Almería ha salido del descenso cuatro meses después y le quedan seis partidos para mantenerse fuera. Ahora las cuentas son otras. Ya depende de si mismo para mantenerse en la Liga Profesional.

Ramis habla de ENERGÍA pero yo me acuerdo de todos los SANTOS cada vez que gana el Almería. Son los año y el haber pasado por Los Franciscanos en mi niñez.

Esta vez ¡Bendito sea Dios! y vamos a olvidarnos para siempre del otro Almería que nos ha tenido 17 jornadas entonando aquello de: ¡Con Dios me acuesto, con Dios me levanto!

Estamos fuera del descenso.

¡Bendito sea Dios!