El control de TVE

Esto de la herencia recibida, de la que tanto ha echado mano el partido en el Gobierno para defenderse de sus incumplimientos y fracasos tiene también algunas cosas buenas. Una de ellas la televisión. Se podrá decir que en punto a tesorería algo dejaba  que desear, pero no así en calidad informativa, profesionalidad y competencia de periodistas y técnicos. Sin llegar a ser la BBC de Londres, no podemos negar que los telediarios durante el mandato de Zapatero gozaron de gran prestigio, según consta en el estudio anual de medios. El PP acaba de entrar a saco en el control de TVE nombrando como director y jefe de informativos a dos personajes anónimos en  el mundo del periodismo, si bien fuertemente ideologizados y de la cuadra de Aznar. Un nombre resume toda una época como ejemplo de siniestro servilismo a la voz de su amo, es el nombre de Urdaci. Los caricaturistas se ceban en él poniéndolo estos días como la sombra inspiradora de Echenique y Somoano. Al tiempo que vemos dolorosas destituciones, con nombres famosos que estuvieron al frente de programas memorables... Como escribe Juan Cruz, al poder se le encomienda que arregle la economía, la educación, la sanidad, no así que meta la tijera en la información. Ésta cuanto más libre mucho mejor. Pero no falla. Vienen tiempos de mucha pelea y de mucha mentira. Al PP le interesa controlar TVE así falte para medicinas. De este modo podrá repetir lo   de la herencia recibida, aunque como en este caso sea una  trola de las que acostumbra. Atención, Ana Pastor, Alicia G. Montano, Pepa Bueno, Fran Llorente, debéis buscar trabajo como primerizos. Han llegado los enchufados de repique y pedo.