Las alarmas IP de Grupo Control impiden los robos con inhibidores

Los robos con inhibidores de frecuencia, que anulan la comunicación de la alarma con la central receptora evitando que se actúe contra el delito, son cada vez m&a

A la Central Receptora de Grupo Control  llegan todos los avisos de alarma.
A la Central Receptora de Grupo Control llegan todos los avisos de alarma.
La Voz de Almería
16:51 • 27 nov. 2015

En los últimos años se ha incrementado el número de robos en los que los ladrones emplean inhibidores de frecuencia para inutilizar las alarmas de las viviendas o comercios, y así perpetrar el delito sin impedimento alguno. Los inhibidores de frecuencia anulan el sistema de comunicación que una alarma establece con la central receptora, el lugar en el que se recibe el aviso y donde se determina la actuación a seguir en cada caso. Si la alarma suena pero esa señal no llega a la central receptora, la eficacia del dispositivo se reduce prácticamente al cien por cien.
La mejor estrategia para impedir que nuestra tienda o nuestra casa sean objeto de un robo con inhibidor de frecuencia consiste en instalar una alarma cuya comunicación con la central receptora sea a través de un sistema IP, como las alarmas de Grupo Control. La comunicación IP permite detectar si nuestra alarma ha sido anulada a través de un inhibidor de frecuencia. 
En el caso de que unos delincuentes utilicen un inhibidor de frecuencia para invalidar la señal que la alarma envía a la central receptora cuando se activa, la comunicación IP posibilita que esta situación se detecte y quede registrada en la central receptora como un aviso de alarma, entonces Grupo Control pone en marcha el protocolo de actuación pertinente.
La conexión IP es un medio de comunicación más seguro que los sistemas más convencionales. Existen cuatro modos de conexión entre una alarma y la central receptora: teléfono fijo, GSM, GPRS y ADSL (estos dos últimos son conexiones IP). Los expertos recomiendan que una alarma compagine dos de estos sistemas para incrementar la fiabilidad del dispositivo y, por tanto, la seguridad. Grupo Control apuesta por una continua evolución tecnológica de sus equipos para dar respuesta a las necesidades de sus clientes. 
El funcionamiento del sistema IP lo podríamos comparar con el de un corazón. Envía de forma continuada unas señales, llamadas pulsos, a la central receptora. En el momento en el que esos pulsos se dejasen de recibir por cualquier motivo, como puede ser por el uso de un inhibidor de frecuencia, entonces se activa la alarma. Las personas que cuenten con esta conexión IP en sus alarmas disfrutarán de una seguridad más integral y efectiva que con cualquier otro sistema. 




 










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